sábado, 15 de febrero de 2014

Reflexiones de bondi

Veo un tipo grande. Veo fragilidad. Veo vejez. Veo una alianza. Una alianza que resbala por un dedo que solía ser fuerte, resistente. Veo amor. Amor que, pese a las décadas sobrevividas, se mantiene, se honra, se respeta, se añora, se defiende. Veo ese dedo que flaquea, esa alianza que hoy le queda grande. Y es que ya a esa edad la vida le queda grande (O es él demasiado grande para la vida? Vaya uno a saber). Vi emoción. Emoción mía. Admiración quizás. Y hasta un poco de miedo... ¿Encontraré a alguien con quien compartir una vida de obstáculos? ¿Alguien con quién llegar a esa edad pasada de moda? ¿Alguien que no le importe que sus dedos no puedan más con ella, él cargue con la alianza igual y me de la mano en una plaza cual incursionistas adolescentes del amor?
Ay soledad soledad, cómo te gusta hacernos temblar!